
Llegar a comprar nuestra primera casa es uno de esos logros enormes en la vida. Hernán lo consiguió después de mucho esfuerzo y muchos años de trabajo. Pero al recibirlo se enfrentó a la situación de tener que comprar los muebles y ahí se dio cuenta de que no era una tarea tan sencilla.
Sabía lo que quería pero, al ponerse a buscar muebles en concreto, empezó a dudar de todo. Pensó que con definir que quería algo elegante, contemporáneo, sobrio y masculino era suficiente, pero no. Empezó por el sillón y al advertir la cantidad de cosas que tenía que decidir acerca de un sillón y la falta de herramientas y criterios para tomar decisiones, optó por pedir ayuda.
Pero claramente le faltaba onda, le faltaba vida y, por sobre todo, le faltaba la impronta de Hernán.
Fue así que buscó en la web y nos contactó para asesorarse. El departamento era divino. Un dos ambientes súper canchero en el corazón de Palermo Soho, con ventanales increíbles, ambientes amplios y lleno de luz. Pero claramente le faltaba onda, le faltaba vida y, por sobre todo, le faltaba la impronta de Hernán.
Cuando empezamos a trabajar, nos contó que era fanático de la playa, en especial de las playas de Río de Janeiro. Obvio que no íbamos a hacer una decoración playera en ese departamento súper urbano, pero entonces le propuse traer de alguna manera indirecta la playa a su casa, y lo hicimos a través de la paleta de colores. Nos inspiramos en los tonos arena, azules y verdes y los combinamos con el único elemento que condicionaba el espacio y que no iba a cambiarse (porque además era divino): el piso de madera.
Les muebles se hicieron todos a medida, en un enchapado de madera reconstituida de roble claro con lustre natural. La madera oscura del piso contrastaba perfecto con la madera clara de los muebles, casi como contrasta la piedra con la arena. Para las telas elegimos tonos neutros que van desde los beige claro en el dormitorio hasta los visones oscuros en el living, combinados con algunos toques de turquesa y verde agua.

En el living, el gran cortinado hace de telón de fondo dándole al espacio un toque de elegancia clásica. La luz es también un elemento central en el proyecto. Luces generales bien direccionales destacan algunas paredes y algunos elementos. Un hermoso colgante negro sobre la mesa completa el living. En el dormitorio, dos bolas de opalina caen directamente del techo sobre las mesas de luz, enmarcando el gran cuadro que artista Pato PK pintó especialmente para Hernán.

No hacen falta muchos elementos para lograr un ambiente lleno de personalidad. Se trata de construir un concepto y tener las herramientas para tomar las decisiones correctas para materializarlo. Por eso siempre es mejor contar con un especialista, como hizo Hernán, que se dio cuenta al empezar y lo agradece hasta hoy en día.