Sin lugar a dudas, la madera es el material por excelencia para materializar nuestros muebles. Desde el equipamiento fijo de una casa, como los muebles de cocina y los placares, hasta el banquito más pequeño, TODO puede (y suele) hacerse en madera. Si bien hay otros materiales como el hierro, el mármol, el vidrio, el acero, y otros, la madera siempre se lleva la mayor proporción. Además, es muy raro encontrar a alguien a quien no le guste la madera en ninguna de sus formas. Habrá a quienes no les gusten las maderas rústicas, y también a quiénes no les gusten los laqueados brillantes, pero es realmente muy poco habitual encontrar alguien a quien no le guste la madera en absoluto. De hecho, yo creo que nunca conocí a nadie y me atrevo a decir que TODOS tenemos madera en los muebles de nuestras casas.
Sin embargo, me he dado cuenta a través de mi trabajo, que no sabemos muy bien cuántas ni cuáles son las opciones que tenemos para elegir las maderas de nuestros muebles. Por eso pensé en armar este artículo para que puedas conocer las diferentes alternativas, sus características técnicas y también la expresión estética.
La primera gran división que tenemos que hacer es entre las maderas MACIZAS y los TABLEROS DE FIBRAS de madera. Dentro de los tableros de fibra vamos a tener varias opciones de laminados y pinturas. Veamos de qué se trata cada una:
1. Maderas macizas
Las “maderas macizas” son piezas enteras de madera natural que no han sufrido ningún tipo de mezcla con otros materiales, ni alteraciones físicas ni químicas. Dicho de otro modo, son un “trozo de árbol”. Es decir que son lo más auténtico de la madera. (Acá quiero hacer una aclaración: muchas veces se piensa que la madera es antiecológica porque supone la tala indiscriminada de árboles pero esto no siempre es así. De hecho, bien explotada y tratada, la madera es un material ecológico por excelencia, pero no es mi propósito en este artículo extenderme en este punto, sólo mencionarlo).
La madera maciza puede provenir de diferentes tipos de árboles, y esto va a cambiar mucho según las regiones. Acá en Argentina las maderas más características son el petiribí, el paraíso, el guatambú, la lenga, el kiri, el pino, el eucaliptu, el laurel, el incienso y también maderas más duras como el lapacho, el quebracho o el algarrobo. Cada una de ellas tiene una calidad y expresión estética distinta. Desde el color hasta los nudos y vetas hacen que cada especie tenga una personalidad diferenciada y nuestra elección dependerá mucho de lo que queramos lograr en nuestros espacios.
También vamos a tener que considerar las cualidades técnicas. Las maderas blandas como el pino o le kiri, pueden no tener la resistencia que necesitamos y también pueden “revirarse” bastante. Las muy duras como el algarrobo o el lapacho, suelen ser muuuy pesadas y esto para los muebles es un problema. Sin embargo son muy buenas para los exteriores. En cambio las maderas semiduras como el petiribí, el laurel, el paraíso, son maderas intermedias que funcionan muy bien para muchos tipo de muebles interiores y para semicubiertos.
Por ejemplo, estas maderas macizas suelen usarse para sillas, patas de mesas, a veces tapas de mesas también, mesadas, respaldos, camas… En cambio ya casi no se usan para muebles como vajilleros, mesas de luz, racks de TV, etc en donde los enchapados funcionan mucho mejor y son más económicos. Por supuesto nada de esto es taxativo. Existen muebles en todo tipo en maderas macizas, pero a veces el costo y el peso hacen que para muebles en donde no necesitamos una gran resistencia estructural, sea más eficiente utilizar tableros enchapados.
Dentro de las ventajas de las maderas macizas podemos mencionar: la durabilidad, la posibilidad de restauración, la resistencia, lo auténtico, lo natural, lo tradicional. Dentro de las desventajas tenemos: el peso (en algunas), la posible aparición de fisuras, la disponibilidad, el estacionado, cierta limitación en los tonos (aunque puede resolverse con tinturas), y aveces el costo.
2. Tableros de fibra
En el mercado son conocidos como MDF. Son tableros de fibras de madera de densidad media que funcionan como base sobre la que se aplica una lámina delgada de algún material que puede ser, ó una lámina de madera natural, ó laminados plásticos de varios tipos, o bien algún tipo de pintura. Estos tableros están compuestos, en su mayor parte, por fibras de madera, mezcladas con un pequeño porcentaje de resinas. Esto los hace muy resistentes y más económicos que las maderas macizas. Además, como están hechos de fibras muuuy finas (como un polvo) permite buenas terminaciones en los cortes y tallados (a diferencia de los antiguos aglomerados).
Pero en sí mimos estos tableros no tienen un gran valor estético. A veces se los usa directamente barnizados o lustrados pero no es para lo están pensados. Por eso se utilizan como soporte para las chapas o láminas que le darán el acabado final. Veamos las diferentes opciones:
2.a. Chapas de madera natural
Es una lámina muuuy finita de madera natural que se “pega” con calor sobre los tableros de MDF para luego ser protegida con alguna laca transparente o lustre. Una de sus principales ventajas es, sin lugar a dudas, su expresión estética. Las más comunes son el cedro o el guatambú, pero no son más las vistosas.
Podemos clasificarlas en “naturales” y “reconstituidas”. Las naturales son una lámina de la madera tal cual sale del árbol, con sus vetas y nudos. En cambio las reconstituidas son tiras finitas o lonjas de madera pero que se “acomodan” artificialmente para conformar un patrón, que suele ser rayado. Estas chapas no tienen la veta natural del árbol sino un “dibujo” fabricado. También suelen teñirse para lograr distintos colores. Nos dan muchísimas posibilidades de diseño tanto por sus tonos como por sus patrones, que nos permiten jugar con la dirección de las vetas y lograr diseños muy originales. Además conservan la expresión natural de la madera.
Hay muchísima variedad de estas chapas, aunque se consiguen en muy pocos lugares. No todos los carpinteros las trabajan ni saben dónde conseguirlas pero descubrirlas es un mundo fascinante. Hay de muchísimos tonos y diferentes veteados. Acá en Argentina se consiguen varias, casi todas importadas: robles, maple, bamboo, hébano, caoba, cerezo, peral y muchísimas otras. Nosotros hemos hecho una cantidad enorme de muebles con chapas de madera natural.
La principal desventaja es que no son económicas y que no admiten muchas restauraciones porque son finitas, pero bien cuidadas no deberían necesitar ser restauradas.
2. b. Laminados plásticos
En este caso se trata de una lámina de algún tipo de plástico que se monta en fábrica sobre el MDF. Las más conocidas son las melaminas, que han ido evolucionando muchísimo y hay una variedad enorme de colores y texturas. Algunas imitan muuuuy bien la madera y también hay líneas llamadas “textiles” que dan la sensación de un entelado. Tienen la ventaja de ser muy resistentes a los golpes, al calor, a las rayaduras y son mucho más económicas que las chapas de madera natural.
En los últimos años salieron otras láminas plásticas con acabados brillantes y un poco más gruesas que mejoran la resistencia de la melamina y permiten acabados de muchos colores con brillo. Se conocen en el mercado por sus marcas comerciales (Rauvisio, Maxigloss, etc.)
Los laminados plásticos son utilizados principalmente en muebles de cocina y placares. Sin embargo, en los últimos tiempos, con los avances en sus posibilidades estéticas han ido conquistado también dormitorios, escritorios y livings, dependiendo de la onda de cada casa. Si queremos lograr ambientes más elegantes o sofisticados, no recomiendo estos laminados, más bien iría por enchapados naturales o laqueados. Pero en espacios más descontracturados, jóvenes e informales, sin lugar a dudas son una excelente opción. También son ideales para dormitorios infantiles o juveniles.
Es clave una excelente ejecución por parte de los carpinteros para resolver con precisión el enchapado de los cantos y los encuentros entre placas. Respecto del tema ecológico, Hay marcas que tienen un fuerte compromiso medioambiental y trabajan bajo normas estrictas de sustentabilidad.
2.c. Laqueados
Otra opción para darle terminación a los tableros de fibras son las lacas poliuretánicas. Es lo que comunmente llamamos “muebles laqueados”. Básicamente es una pintura de alta resistencia que se aplica a soplete en cabinas especiales sobre el tablero de madera.
Tienen la ventaja de que no hay limitación para los colores ni para los acabados. Se puede lograr cualquier color con acabado mate, brillante o satinado. También pueden aplicase sobre cualquier morfología: superficies lisas, molduradas, curvadas, relieves, etc. Una de las principales desventajas es que no son muy resistentes a los golpes ni a las rayaduras ni al calor. Son muebles que requieren de mucho cuidado.
Sin embargo el laqueado se puede utilizar para todo tipo de muebles: cocinas, baños, mesas, sillas, muebles de TV, mesas de luz, respaldos, dormitorios, escritorios y una larga lista de etcéteras. Siempre queda muy elegante y moderno. Es ideal para ambientes contemporáneos, minimalistas o clásicos. No son muebles muy económicos pero tal vez su valor esté por debajo de los enchapados de madera natural.
Como verán las opciones son múltiples. Por eso hay tres cosas que me parecen importantes para poder evaluar cuál es la mejor opción para vos.
1. La onda que querés lograr para tu casa y para cada espacio y cada mueble en particular.
2. La funcionalidad y los requerimientos técnicos según el tipo de mueble y el tipo de uso.
3. Tus posibilidades económicas.
Haciendo un buen análisis de estas tres variables, podrás decidir cuál es la mejor opción para vos en cada ambiente de tu casa y en cada mueble específico. Y siempre una buena estrategia es MEZCLAR, COMBINAR. Si lo hacemos con gracia y con criterio, las mezclas suelen hacer que los espacios sean más personales e interesantes.
¡Hasta la próxima!